El pais se parece bastante a India en cuanto a medios, infraestructuras,... Pero la gente en general es mas amable, tranquila, la mayoria siempre con una sonrisa. No te persiguen vayas donde vayas aunque igualmente intentan timarte... Asi que dependes de tus habilidades de regateo.
La ciudad esta llena de templos, en cada callejuela por la que pasees te encuentras un templito lleno de ofrendas o alguien orando. Las plazas antiguas tanto de Kathmandu como de Patan y Bhaktapur son un hervidero tanto de turistas como de puestecitos de gente local vendiendo artesania tipica, y antiguedades a lo mejor no tan tipicas, pero siempre curiosas.
No se si se puede decir que es mas espiritual que India pero muy parecida. Y por su puesto, lo mejor las Stupas con su paz y espiritualidad budista inigualable...
La comida esta buena, principalmente noodles, arroz con diferentes salsas y momos. Ya nos hemos quitado el mono de los momos... Estan riquisimos.
Como es habitual hemos terminado de ver las cosas antes del tiempo previsto, asi que hoy hemos callejeado por Thamel, calle de tiendas para dar y vender... Ademas de gestionar lo que queda de viaje con el amigo de Chus y Silvia. Tras mucho meditar no hacemos ningun treking y queda descartado el vuelo al Everest. El primero por el tiempo, ya que en cualquier momento se pone a llover y no para, ademas de aparecer todas las sanguijuelas del mundo mundial. Y el segundo porque no merece la pena pagar semejante pastizal para 1 hora y pico de vuelo. Ya volveremos en condiciones para verlo de cerca...
Tambien hemos encontrado un momento para la tranquilidad entre tanto jaleo de coches, bicicletas, vendedores, bocinazos, etc, para relajarnos en el "Jardin de los suenos" antes de preparar otra vez la mochila y poner rumbo a otra ciudad. Pokhara.
Manana a las 5.45 arriba y armados de paciencia para aguantar las horas de bus. Una vez alli, turismo y haremos alguna pequena andada si el tiempo lo permite...
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